Economista y profesora Martha Quiñones. (Foto El Nuevo Día) |
¿Qué tienen en común las protestas en Rincón, el paro de camioneros y el mensaje constante de que la gente es vaga y como reciben el dinero del PUA, no quieren trabajar? Que le sirven a al Gobierno y a la Junta de Control Fiscal (JCF) para ocultar ante la opinión pública un lío de proporciones épicas para Puerto Rico: Se trata de la noticia que la agencia crediticia Moody’s acaba de eliminar a Puerto Rico de sus clasificaciones.
Tanto la JCF como el gobierno, han querido desviar la atención pública a otros asuntos para que no se cuestione cómo esto afecta a los puertorriqueños, explicó la reconocida economista Martha Quiñones.
“Esta semana dieron a los empleados públicos libre para que no se dieran cuenta de lo que está pasando. Para que no vean como se afecta la economía y no pregunte nada. El efecto de esta decisión de Moody’s es que los bonos se van a vender a un precio incluso más bajo, porque no tienen la confianza de las casas acreditadoras. El problema es después”, dijo la también profesora de la Universidad de Puerto Rico.
Como si eso fuera poco, según la economista, la JCF se toma prerrogativas que no le corresponden. Un ejemplo es el caso de los camioneros. La semana pasada hubo un paro de los camioneros que, según el portavoz del Frente Amplio de Camioneros, Víctor Rodríguez, respondía a que en 15 años no les han revisado las tarifas y la JCF quiso intervenir, siendo ellos empresarios privados, no de gobierno.
En la Junta asumen que son los que mandan y entran en cosas que no les corresponde. Dicen que tienen que intervenir en todo lo que viene con economía de Puerto Rico, cuando la realidad es que ellos no fueron creados para bregar con todo lo de la economía, sino con el asunto de los bonos y las finanzas del gobierno”, puntualizó.
También pretenden entrar en el negocio de las cooperativas y callan en negocios que afectan la economía como el alza en la electricidad que impuso LUMA Energy y el negocio en la Autoridad de Puertos.
Martha Quiñones, economista y profesora de la Universidad de Puerto Rico. |
“Lo que pasa en Puertos, lo que pasa con LUMA y como ahora, que van a privatizar Acueductos, todo tiene un costo en el bolsillo del puertorriqueño que no tiene dinero. Pues, tendremos que comprar cisternas privadas para tener agua en las casas”, acotó.
La economista también habló del problema en que la JCF, el gobierno y sectores empresariales, insistan en pagar el salario mínimo federal y se quejen de aumentos. Esto, dijo, pone a los trabajadores en condiciones parecidas a una esclavitud.
A este problema se añade la corrupción el desvío de leyes para favorecer a personas vinculadas al gobierno. A manera de ejemplo señaló la controversia en el edificio Sol y Playa en Rincón, donde el gobierno protege a los dueños de apartamentos que quieren construir una piscina en un zona de protección ecológica, y violando leyes.
“Es una componenda entre la corrupción gubernamental y los intereses que quieren quedarse con los dineros de Puerto Rico”, denunció la economista.
También denunció cómo desplazan a los puertorriqueños para favorecer a los intereses extranjeros y hacer que los locales, emigren. “Le hacen la vida imposible a los puertorriqueños para que la gente se vea obligada a emigrar. Vienen de repente, todos los extranjeros a comprarte tu casa o tu finca. Como no tienes con qué vivir, tú estás loco por irte, porque no tienes dinero, y la vendes barato. Entonces ellos (los extranjeros) cogen esa misma casa o esa finca y montan negocios, pagando menos impuestos que nosotros”, dijo.
“Nos hacen cada vez más pobres porque la capacidad de recaudación del gobierno de Puerto Rico se va limitando y vemos cada vez más que la Junta de Control Fiscal no se mete con las leyes 20-22. Parte del plan es sacar a los puertorriqueños de aquí porque lógicamente, cambias el perfil del país. Son menos puertorriqueños y más personas de los Estados Unidos que pueden decidir el futuro de la isla. Eso es bien peligroso, porque la isla se queda sin puertorriqueños y los empleos que le dan a los puertorriqueños, son los de sirvienta en la casa, jardinero”, agregó.
La economista también dijo que el pueblo está desinformado porque los medios corporativos y tradicionales de comunicación desinforman, o dan parcialmente las noticias sin explicar y vetan a los que dicen la verdad porque atenta contra los anunciantes. “Tenemos que dar la batalla”, dijo Quiñones.