Insurrección en el Capitolio en los Estados Unidos de América. |
Hoy, muchos de esos políticos locales están inquietos. No les ha quedado más remedio que criticar lo que pasó en la capital federal, ante la mirada atónita del planeta entero. Los Estados Unidos de Norteamérica se comportó como cualquier país en rebelión interna. No fueron los “pelús” de la Universidad de Puerto Rico ni los comunistas de Cuba o Venezuela. No fueron los “negros acomplejados” como les dicen a los que reclaman derechos. No fueron los nacionalistas boricuas en los años 50. No. Fueron americanos, en su inmensa mayoría neonazis blancos (con uno que otro negro confundido y al menos dos banderas boricuas), quienes tomaron por asalto el Congreso en Washington.
Por eso a algunos de los republicanos que le cargaban la cola y le aplaudían a Trump sus sandeces desde Puerto Rico, no les ha quedado otra que criticarlo, aunque tímidamente. Johnny Méndez, Luis Fortuño y Jennifer González son ejemplos de ello. Las fotos sonriendo y abrazando a Trump, ahora le pesan. Quedan como evidencia del servilismo, de ser boca abajo, todo por rogar dádivas federales o por tener y sentirse con poder ante los boricuas bestiales.
La democracia está en entredicho allá y acá, de eso no hay duda. Allá, con un gobernante que despertó el monstruo de las desigualdades y azuzó a los racistas para que invadieran el Capitolio. Su retórica de odio catapultada en estos cuatro años por Twitter que ahora lo censuró, pero que permitió que congregara a sus seguidores, dejó un saldo de al menos cuatro muertos, 15 oficiales heridos y decenas de afectados tras los ataques al Congreso.
La mirada cómplice del oficial de seguridad mientras paseaban la bandera confederada por el Capitolio. |
Y como si eso fuera poco, vemos otro asalto al proceso democrático con una Comisión Estatal de Elecciones que, por un lado, permite la incertidumbre electoral en un pueblo como Guánica, destruido por los terremotos y que un año más tarde de eso hechos, todavía no tiene alcalde confirmado. Por otro lado, esa misma Comisión se amarra al bipartidismo penepé-popular y quiere quitarse del medio a las minorías, por eso sacan al Partido Independentista Puertorriqueño, al Proyecto Dignidad y al Movimiento Victoria Ciudadana.
Por eso digo que la democracia está en entredicho allá y acá. Hoy más que nunca hay que reflexionar sobre lo que nos pasa y cómo estas cosas nos afectan a todos. Hay que pensar en dónde estamos. ¿Dónde quedan las estructuras de poder? ¿Por qué se entroniza la desigualdad? ¿Cuál es el castigo que se le da a los que buscan equidad o respeto? ¿Por qué es que quieren callan a los que lo señalan?
Es en ese ambiente que se dio el caos ayer. La frase de “La anarquía reinó en los Estados Unidos”, era el titular de primera plana en un sinnúmero de periódicos y medios en todo el mundo.
Es incuestionable que fue un intento de “autogolpe incitado por el propio Trump”, como dijo el politólogo de la Universdad de Harvard, Steven Levitsky. Mientras que Joe Biden dijo que no era una protesta sino una insurrección.Lo cierto es todavía Trump tiene poder. Lo tendrá hasta el 20 de enero, cuando a regañadientes tendrá que entregarlo al nuevo presidente ya confirmado. Pero hoy apenas es 7 de enero. En 13 días muchas cosas pueden suceder, y por eso ya casi 100 congresistas demócratas apoyan el residenciamiento de Trump mediante un “impeachment”.
Mientras tanto, de hoy al 20 de enero tenemos que plantearnos ¿qué es lo próximo? ¿Por dónde vienen los tiros? Si la democraciaestá en entredicho, más vale que nos preparemos.
Para ampliar la explicación, favor escuchar el siguiente audio del programa de hoy de En Blanco y Negro con Sandra.https://anchor.fm/sandrarodriguezcotto/episodes/JUEVES-ENERO-7-La-democracia-en-entredicho-con-el-autogolpe-en-Estados-Unidos-y-la-monarqua-nepotismo-Pierlusi-en-Puerto-Rico-eolgr1