(NOTA: Esta es una carta abierta que acabo de publicar hoy domingo, 7 de agosto de 2022, en mis redes sociales, en respuesta a un contundente escrito de la activista y feminista independentista Edda López sobre las criticas hechas a la Comisionada Residente Jennifer González por su apariencia y por su boda)
Hola Edda. Al ver lo que opinas sobre la boda de Jennifer González, te comparto esta reflexión.
Lo primero que quiero decirte es que te doy las gracias desde lo más profundo de mi corazón por siempre estar ahí. Tu apoyo, acompañamiento y tu sapiencia has sido bien importantes. En estas semanas en las que ha habido un operativo político y mediático para tratar de neutralizar mi trabajo como periodista independiente, destruyendo mi reputación, regando mentiras y encima, exponiendo mi vida y la seguridad de mi hija y mis amados padres, gente como tú han estado desde el primer momento acompañándome.
No ha sido fácil tener que encarar que amenacen a uno, que rieguen mentiras, que publiquen mi dirección donde vivo sola con mi hija, y encima, que inciten a que la gente ataque la casa de mis padres y me insulten con palabras que van desde “mona” hasta “hipócrita”. Encima de eso, aguantar que una jueza no haya visto nada malo en esto, lo que nuevamente evidencia como los tribunales en Puerto Rico dejan sola a una mujer en su reclamo de protección.
Pero esto no va a quedarse así y yo no tengo miedo. Los vídeos y los audios que constatan todos esos insultos de Kobbo Santarrosa están disponibles como una prueba irrefutable, aun cuando TeleOnce y ese programa los han pretendido borrar de Facebook, YouTube y de su pagina web. Todos se transmitieron por televisión, que se rige por las reglas de la FCC, e incitar a la violencia, es un delito.
Sólo quiero decirte que los supuestos “amigos”, conocidos, parientes, políticos, compañeros de los medios y los supuestos “analistas” tendrán que rendir cuentas por ser parte de este esquema o por cerrar su boca, lo que los hace cómplices al aceptar estos ataques.
¿Por qué será que siempre es así contra las mujeres? La crítica es más dura, más intolerante si la mujer no sigue las “normas”. Si no es madre, esposa con 2.5 hijos, flaca, blanca y preferiblemente rubia (de tinte) y con dinero, proveniente de cierta condición social, no la toman en serio. Por eso vez que Puerto Rico es dónde más rubias fabricadas habitan, no por moda sino para negarse a sí mismas, y dónde más se ataca a lo que piensan o hacen mujeres negras, viejas o trans, por darte un ejemplo. Lo mismo pasa con las gordas. Si están en la política es peor.
Y oye, estas críticas a la mujer aplican en todos los sectores. La gente actúa igual de intolerante hacia la mujer desde la extrema derecha de las estructuras del Partido Nuevo Progresista, el inmovilismo del Partido Popular Democrático, del Partido Independentista Puertorriqueño, hasta los sectores de extrema izquierda, los grupos sociales y sí, hasta entre los miembros de los medios y la prensa.
La mujer en la esfera pública y en la política es donde mas se le critica. Te dos tres ejemplos. Fíjate que a María de Lourdes Santiago del PIP la gente la crítica por ser “inteligente”. Quizás por eso amedrenta a muchos que no pueden estar a la altura de su erudición. A Ana Irma Rivera Lassen del MVC por ser inteligente y negra, ya provoca coraje en muchas personas que no lo toleran.
A Sila M. Calderón la atacan ahora por su edad, cuando ella luce tan bien mejor que muchas nenas de 25. Y la atacan por haberse divorciado en La Fortaleza, pero nadie alaba su gestión de años por mujeres y comunidades pobres. Es la única – la ÚNICA – exgobernante de este país que dedica su tiempo a desarrollar comunidades y apoderarlos. Ni Romero, ni RHC, ni Aníbal, muchísimo menos Fortuño, AGP ni los dos Rosselló…. Pero de Sila se burlan. Compárala a ella con Wanda Vázquez, quien decía ser pulcra, pero acaba de ser arrestada por corrupta.
A la mujer en la política se le critica más, se le exige más y es mucho mas propensa a la burla que los hombres. Eso lo ha experimentado Jennifer González toda su vida, y puedo decir públicamente que lo he conversado con ella durante muchos, muchos años.
Conozco a la Comisionada Residente desde hace más de 25 años cuando apenas se iniciaba en la política y venía de la mano de una apreciada amiga mutua, doña Miriam Ramírez de Ferrer, que fue quien la catapultó a ese mundo. Después con Cucusa Hernández trabajó mano a mano, y con doña Zory Fonalledas. A todas ellas las conozco y nos tenemos respeto mutuo. Puedo dar fe de cómo se han burlado siempre de Jennifer González y eso está mal. Yo siempre lo he criticado privada y públicamente.
Muchas veces he conversado con Jennifer González sobre lo duro que es la sociedad en general contra las mujeres. Las burlas, los insultos y epítetos que ha recibido ella a lo largo de su vida son horrendos. Ha tenido que desarrollar un “cuero duro” como dicen, para aguantar tantas burlas. Por eso, creo que todo lo que he visto en estos días en torno a su boda, nos debe llamar a reflexionar lo mal que anda esta sociedad puertorriqueña.
Si reclaman vivir en una democracia, lo primero debe ser respetar las decisiones que tomen los demás.
Si Jennifer González decidió hacer pública su relación, cortejo y matrimonio, esa es su decisión. Especular por qué lo hizo, las motivaciones y beneficios, pues, es lo mismo que equipararos a la cultura del chisme que promueve gente como uno de los que me atacan, Kobbo Santarrosa. Burlarse y generar chismes para ganar ratings o clics es asqueante también de parte de los medios, de verdad.
¿Que si genera interés por ser figura pública? Claro que sí, pero es su vida privada. ¿Qué si usó fondos públicos para su boda? Eso debería ser cuestionado, pero no fue así. Su boda fue costeada, según se dijo, con fondos privados. ¿Qué si quiere sacar millaje político? Obvio, todos los políticos buscan exposición.
Ahora, eso de entrar a especular sobre su vida personal, sus relaciones o decisiones de vida, si no conllevan gastos públicos. Esta mal. Burlarse de ella por ser soltera, o no haberse casado antes, o ser gorda, o por su vida íntima que a nadie le consta, es espantoso. Esta sociedad que clama tanto por que se elimine el bullying es la primera en burlarse y actuar así contra otros.
El tiempo dirá qué le depara a este matrimonio y a Jennifer González en la política. Ya ella tendrá que rendir cuentas sobre sus gestiones, conexiones, acciones y omisiones en su día, porque hasta ahora, muy pocos periodistas la hemos fiscalizado consistemente. Eso, aunque a muchos no les guste admitirlo, es así.
Yo te puedo confirmar que yo sí la he cuestionado y fiscalizado en sus anuncios. He revelado sus nexos, por ejemplo, con las políticas del Colegio de Médicos y el negocio de las aseguradoras de salud, entre otros temas.
Jennifer González, a diferencia del gobernador Pedro Pierluisi y de otros políticos del PNP que tienen miedo y se esconden, siempre me ha dado cara y me contesta las preguntas. Pocos en el PNP se atreven hacerlo abiertamente.
Sé que a veces ella se ha molestado por algunos temas que no quisiera en la opinión pública, pero me da su punto de vista y yo lo publico. Ella sabe que voy a darle espacio y que el tiempo siempre confirma o desmiente a los políticos. Ella, como hace Thomas Rivera Schatz, siempre me contestan porque saben que yo publico exactamente lo que ellos dicen, y que que cuando cuestiono es porque tengo documentos y evidencia.
Pero coincido con que hay que analizar más su gestión y el uso de fondos públicos. Hay medios que dedicaron días a la cobertura “pre-boda” y el minuto a minuto, pero nunca han publicado ni una nota sobre sus gastos en guaguas negras, personal, propaganda o como operan sus oficinas en Washington y en Puerto Rico.
Creo que en general, la prensa ha sido muy laxa con la fiscalización a la gestión de la Comisionada Residente. Le creen sus comunicados de prensa de fondos que supuestamente ella trae y no se ven. Tampoco cuestionan sus omisiones en torno al estatus, a corrupción del gobierno de Pierluisi, y la ahora acusada federal Wanda Vázquez. Menos evalúan el rol de Jennifer González en esas administraciones.
El silencio de Jennifer González es elocuente sobre el despilfarro con los supuestos cabilderos entre los que se encuentra el corrupto botado por el pueblo, Ricky Rosselló. Ella no dice hada que ahora los secuaces de ese exgobernante que salieron corriendo de aquí en el 2019, están ocupando espacios, manipulando para reescribir la historia y dirigiendo campañas de descrédito en redes sociales y e la televisión. Algunos de esas personas estaban allí en la boda y posaron sonrientes ante las cámaras.
Los cabilderos y la gente de sectores que mueven muchos fondos en el tema de la salud, la construcción, la banca, las carreteras y otros que se ven en las fotos de la boda de la Comisionada, imagino que quizás serán mencionados, pero eso el tiempo lo dirá.
Como periodista, hay que cuestionar y fiscalizar la gestión de Jennifer González. Eso no significa que uno se convierta en “portavoz” ni mucho menos en “payolero” de ese político. Por el contrario, demuestra que se puede fiscalizar con respeto.
A pesar de las diferencias que tengo con Jennifer González, siempre ha habido ese respeto mutuo y ella siempre ha respondido a mi fiscalización con igual respeto. Yo rechazo las burlas que le hacen.
Como bien dices, la política no tiene que ser cruel ni burlona. La interacción entre las personas puede ser digna.
Yo abogo por eso, con todos.
Sandra D. Rodríguez Cotto
Este fue el mensaje original de Edda López en la red social de Facebook
Pensaba en esto esta semana pasada.
¿Por qué nos sale tan natural atacar en el carácter personal asuntos que tienen que ver con política?
Si consideramos que la boda de la Comisionada Residente es ____________, ¿por qué cuestionamos su decisión personal? Cada quién tendrá que vivir las consecuencias de sus actos.
Si consideramos que, políticamente, es una manipulación, ¿por qué en vez de criticar eso no hablamos de otras manipulaciones que permitimos?
En estos tiempos en que nadie engaña a nadie, quien la apoye porque se casó en estas circunstancias también debe cuestionar que la hermana del gobernador lleva 1 año, 7 meses y 5 días ocupando un puesto público ilegalmente. Ha tenido acceso a muchísima información confidencial, su esposo es quien decide dónde colocan a la gente contratada, y no hay ni una queja.
Igualmente, las denuncias de acciones racistas contra mujeres evidentemente negras o afrodescendientes quedan impunes o personas privilegian algunas denuncias sobre otras. Sandra Rodríguez Cotto es un gran ejemplo: una maquinaria mediática se lanza contra ella, su padre, su madre, su hija y nada pasa. Solicitudes de acompañamiento por racismo quedan desatendidas. ¿Dónde están esas posturas de repudio al racismo, venga de donde venga? ¿Por qué defiende álgidamente sus conductas -aunque sean racistas y prejuiciadas-, pero permanece en silencio cuando se violenta, vulnera, tolera el maltrato contra compañeres negres?
Por eso, es vital cuestionar el pésimo trabajo que hace la comisionada residente como parte de su agenda anexionista, pero me pregunto qué tienen que ver las donas con su boda.
La política no tiene que ser cruel y burlona.
La interacción entre las personas puede ser digna.
No todo lo vinculado a un proceso nos pertenece. Maneja tu carril; es posible que nunca tengas que bifurcarte con esos otros carriles.
No me sorprendería que esto fuera una estrategia mediática, pero que Jennifer González cargue con las consecuencias de sus actos.
Nadie debe opinar ¡nunca! sobre el físico de otra persona. Es irrelevante e irrespetuoso. El físico es nada para una persona sin escrúpulos: miren a Wanda Vázquez, que ni las mascarillas Carrazana y su actitud de Claire Underwood le fueron útiles el viernes al ocupar las primeras planas de todos los medios.
Puerto Rico es una nación con problemas de obesidad. ¿Nos burlaremos de todas las personas gordas, aunque sean nuestra mamá, cría, papá, crías, parejas, gente amada?
Escuchemos a personas que han logrado perder peso y llegar a uno saludable; encontraremos historias de profundo dolor. Ser esbeltxs en este país es casi imposible. Ser mujer en este país es un reto complicadísimo. Ser negra en este país es un elemento que añade más prejuicio a las luchas, pero de manera exponencial.
¿Qué nos cuentan nuestros espejos?
Me ofende más tener que mantener en DC a una persona que ni cuentas rinde y atrasa la descolonización de #PuertoRico que el dato de que padre Willie haya oficiado una boda.
Era eso. Sigo en mi esquinita.
Edda López
A su vez, Edda López, hacía referencia a este comentario de Glory Ortiz en la red social de Facebook
Leer tanta gente burlarse de JG por la boda me ofende. Me duele. Y saben porqué? No porque sea una boda falsa, por interés o por lo que sea, no me consta. Pero porque se burlan de ella porque es gordita. Porque los gorditos no tenemos derecho a ser felices. Pq la maldita sociedad otorga la felicidad y el amor solo a los flacos. Eso me ofende, me duele. Y tengo tantas amistades burlándose de ella. Es nefasto y repugnante. Ahí veo su moral y sus valores. Soy gordita y tengo tanto derecho a ser felíz como cualquier mujer flaca. Y mire... hay hombres que les gustan las gorditas y por el prejuicio y miedo a la burla se buscan mujeres que cumplan los requisitos sociales y son infelices. Al hombre que se enamora de una gordita le dicen basura y al gordito de quien se enamora un flaquita le dicen titán, caballo, dios. La sociedad apesta y es la que lleva a las desgracias mundiales.